1.12.16

📡  MONOME
Desde hoy pertenezco a la única secta de la historia que no tiene ningún tono peyorativo, la única que aunque está entre nosotros habita en otra dimensión. Cuando sepa cómo interpretar algo con mi nuevo instrumento fundamental publicaré mis avances. Ese misterio es parte esencial. ‘Los diarios del Monome’. O 'Todos los días son mañana’. O 'Hexabranquio’. No sé cómo se podría titular la serie. Todo me resulta demasiado evidente. En la renovación constante de mi equipo y home studio, como el agua del charco del bosque, he vendido unas cuantas cosas de las que tengo repuestos que me gustan más: una guitarra, un sintetizador, una mesa de mezclas… por adquirir esta pieza única de futuro aleatorio y naturaleza minimalista.